ya nos vamos – otra vez

Ultimas impresiones en Bogotá, en la séptima con Camilo y familia en un domingo en la ciclovía

La séptima en hora pico – vista del balcón desde el piso 27, donde vivimos los últimos cinco meses.

Arepa a la nic, con vegetales al horno y Brie

Gracias a las gemelas por ayudarnos a limpiar el apto

new travel style; we’re are carrying half a kitchen, thanks to NadjaMarkJunaMira also with Ovomaltine – a little bit of Switzerland on the road

Vender todo, botar y regalar el resto. Reducir las cosas materiales por una maleta, una proceso díficil para Lau, pero ella es valiente 🙂 Yo solo voy a extrañar la cama, una SEALY super comoda, que perdida tan dura, pero menos mal: Los papás de Lau la difrutan ahora. Empacar es duro – Lau no puede mas!

Las despedidas siempre duelen

Dieses Mal mit nur zwei Koffern, zwei Rucksäcken und zwei Kissen. Aber im Moment immer noch viel zu viel Gewicht. Wir haben bis zum 20. Juni, bis zum ersten Flug in die Galapagos, Zeit um dieses Problem zu lösen. Rund einen Monat. Ich denke Lau transportiert in ihrem blauen Koffer momentan etwa 40 Kilogramm, also etwa 17 Kilo Übergewicht, ich geschätzte dreissig, etwa  sieben Kilo zu viel…. Dafür haben wir aber den kleinen schwarzen Cabintrolley abgeschafft. Nun ja der erste Flug ist Inland in Equador, heisst wir können theoretisch die schweren Flüssigkeiten unbeschränkt ins Handgepäck verfrachten.

we started with a 14 hours trip to „Cali ve“. Here you see a typical stopover for buses to have lunch

Los caleños son muy amables, parecidos a los rolos, el clima es chevere, la ciudad muy tranquila, al mínimo en el barrio los libertadores… hier würde es sich durchaus auch leben lassen – doch wir haben andere Pläne, we are on the road again!

En Cali Transmilenio se llama MIO. El mismo sistema del transporte publico, solo que los buses son azules y no rojos

Laurita pequeñita con dos años, que muñeca tan tierna